Miel de Montaña.
Esta miel, es la recolectada por las abejas donde predominan floraciones silvestres de montaña, tales como roble, encina, brezos, madroños y flores de monte bajo.
Como diferencia de otras mieles, o mielatos, la miel de montaña podríamos decir que es una mezcla de distintos néctares y mielatos, producidos por la flora autóctona salvaje de la Península Ibérica y secreciones de encinas, que están situadas a una cierta altura sobre el nivel del mar, donde las floraciones empiezan a ser distintas a las que se encuentran en las sierras, o bosques.
Puede llegar a confundirse con mieles de encina o mieles de bosque, pero en realidad en su composición hay ciertas diferencias.
Su composición es muy dispar, ya que su contenido en polénes y néctares es muy variable, aunque por norma general, abunda pólenes de eucalipto, brezo y tomillo.
El aroma de esta miel, es intenso, a tierra húmeda, frondosidad, bosque, con toques malteados, muy agradable.
De color ámbar tirando a oscuro, densa, viscosa y fluida.
Con gusto pronunciado, persistente, dulce en líneas generales
Beneficios de la Miel de Montaña.
Consumir regularmente Miel de Montaña, nos aporta sales hierro y sales minerales, ya que es rica en estos dos elementos tan valiosos para reforzar las defensas del sistema inmunológico.
En deportistas, es una miel muy a tener en cuenta, pues como hemos dicho anteriormente, es rica en minerales, actuando así como remineralizante para nuestro organismo.
Gracias a su acción depurativa, esta miel se debe tener en consideración para combatir dolencias de cálculos renales.
Podemos englobarla en el bloque de mieles ricas en hierro y sales minerales junto a la Miel de Encina, Miel de Aguacate, Miel de Castaño y Miel de Retama.
Para que sirve la Miel de Montaña.
- Es antimicrobiana, por lo tanto fortalece el sistema inmunológico.
- Expectorante, alivia la tos de pecho, resfriados y dolores de garganta producidos por la irritación de la misma.
- Ayuda como tratamiento en inflamaciones ginecológicas causadas por virus, bacterias, cándidas…
- Cicatrizante en casos de heridas cutáneas.
Notas de cata y características sensoriales
Aspecto visual:
- Ámbar a Ámbar muy oscuro.
Aroma:
- Floral intenso.
- Medianamente persistente.
- Notas a cereales tostados, malteado.
Gusto:
- Dulzor intermedio.
- Ciertas notas saladas poco persistentes.
- Ligeras notas amargas si contiene brezos.
Cristalización:
- Lenta
En resumen, si lo que buscas es una miel intensa, con un dulzor medio, que al cerrar los ojos y destapar el bote te traslade al monte, la miel de montaña debe ser una de las mieles que debes tener en tu despensa.